Luego de haber realizado el contacto y con el fin de crear su muro verde, nos reunimos con usted y visitamos el lugar elegido. Discutimos sus deseos, ver posibles espacios verticales y responder a cualquier pregunta que pueda tener. Durante esta reunión inicial tomamos fotografías, nota de los colores principales y el estilo general utilizado en la decoración. En la preparación de cada propuesta se mide la cantidad de luz natural disponible para el espacio potencial de la pared verde y el factor de exposición al sol y otros elementos como la orientación espacial, la humedad, etc.

Una vez que establecemos la fecha de instalación, llegaremos a su ubicación e iniciaremos el proceso de construcción de su muro verde.

Creamos un sistema de riego automático que suministrará a las plantas la cantidad ideal de agua y nutrientes.

Para los jardines interiores, dependiendo de la cantidad de luz natural que hay, se deberá montar lámparas para iluminar la pared. La iluminación aumenta la visibilidad de la obra maestra viva y ayuda a que las plantas consigan sus requisitos mínimos de luz, especialmente si tienen poca o ninguna luz natural.

Una vez que la pared se ha construido con los sistemas de riego y de iluminación en su lugar las plantas se agregan. Esta es la parte divertida y cuando ocurre la magia. ¡Dentro de unos pocos días su pared se transformará de un aburrido “gris” a un verde y al cabo de unos meses un exuberante jardín vertical!